Stalingrado fue la batalla más feroz y mortal en la historia de la humanidad, con un número de muertos se estima en más de un millón de dólares en tan sólo seis meses. Su importancia fue inmediatamente percibida por las autoridades soviéticas, que decidió enviar una delegación de los historiadores de moscú, con el propósito de registrar para la posteridad, las voces de los defensores de Stalingrado. Mientras que hemos llevado a cabo la batalla, no corresponsal extranjero fue permitido viajar a Stalingrado. Este hecho, junto con la imposibilidad de acceder a ella, hasta muy recientemente, los archivos rusos, ha llevado a la