De un ciudadano centrado en la perspectiva, que ponen la cara y la voz, rojo Trasero profundiza en la lógica subyacente de la violencia que ha sido brutal en contra de los opositores políticos en la zona republicana durante la guerra civil española (1936-1939). En contraste con los métodos y estudios de la mayoría, han tendido a dar prioridad a la historia de las ciudades y de la población urbana, a pesar de que el perfil que era esencialmente agraria presentado por la sociedad de entonces, la mirada ha sido usado aquí en el mundo rural, el escenario preferido para calibrar el significado y alcance de la política, los conflictos y las contradicciones que se extendió por España en los años treinta. En medio de un contexto europeo marcado por la radical estrechamiento de los valores democráticos, el golpe de estado del 18 de julio de 1936 y la guerra y la revolución consiguiente fueron las circunstancias que marcaron estos asesinatos, una especie de política selectiva de compensación que respondieron al objetivo inicial para el control de un territorio en disputa y neutralizar a los rebeldes. Pero esta violencia, además de ser mediado directamente por el conflicto en curso y las represalias inherentes a la misma, también respondió a los mitos movilizadores y las tensiones de la política internacional de la época, las presuposiciones ideológicas fomentado por la deshumanización del adversario y a las experiencias traumáticas de las niñas de la batalla política cometidos en años anteriores.