En los años 70.Aniversario de la publicación de George Orwell, 1984, el clásico de distopías que surge como una crítica de la política, apenas disimulada, los regímenes totalitarios actuales de instalación a un futuro sombrío, el Mundo de Orwell extracto de la prueba, una parte del espíritu de la obra, y está diseñado para servir como una advertencia a los navegantes ?de la red y de la vida diaria? frente a los retos de un mundo nuevo. Un mundo marcado por la aceleración de los cambios en la tecnología que se imponen a nosotros en todos los ámbitos de la vida cotidiana en la velocidad de la luz, la determinación de la forma en que nos comunicamos, el trabajo e incluso de pensar. Un mundo que implica, además, los grandes peligros a los valores, las identidades y concepciones que nos han acompañado, al menos desde la Ilustración. Algunos de estos peligros son inimaginables; en el otro, predecible, y aún otros lo presentan como una grave amenaza para nuestra seguridad y nuestra libertad.
Ángel Gómez de Ágreda toma en este trabajo, la tarea de revisar, con información, ejemplos, y un placer digno de alabanza, el estado de la cuestión: la manipulación, el ocultamiento de la verdad, el fin del trabajo tal y como lo conocíamos hasta ahora, el cuestionamiento de los valores de respeto de la privacidad, los riesgos para las libertades individuales y colectivas. Producir escalofríos, la mayoría de los eventos y de los casos recogidos por el autor, que retrata una realidad que es a veces aterrador, una guerra de todos contra todos. Y sin embargo?
Y, sin embargo, no son tratados en estas páginas, para argumentar las ventajas o desventajas de la tecnología ?raro para ser un tecnófobo o un tecnófilo; el futuro, nos guste o no, estamos aquí para el mal? o para bien?. Lo que hace el autor es destacar la necesidad de desarrollar las herramientas intelectuales necesarias para sobrevivir a la nueva realidad y, si es posible, para obtener el máximo. Es un poco menos de un imperativo moral para asumir la responsabilidad de con
