Cuando un bebé nace, sabe en el fondo de su ser que la razón por la que el encarnado es ser él mismo para vivir experiencias diferentes. Todos tenemos la misma misión de llegar a este planeta: «vivir la experiencia una y otra vez, hasta que nos acepta y nos ama a través de ellos». Al nacer, nos hemos centrado principalmente en las necesidades de nuestra alma, que nos quiere aceptar con nuestras experiencias, nuestras faltas, sus potencialidades, sus debilidades, sus deseos, su personalidad… Todos tenemos necesidades. Sin embargo, poco tiempo después del nacimiento, nos damos cuenta de que las auc