Luis de la Palma (1560-1641) fue un sacerdote jesuita, teólogo y autor de los libros espirituales de la misma altura de San Ignacio de Loyola, San Juan de Ávila, entre otros. Es la urna de las pocas obras publicadas en el autor de la vida (1624), y son sus meditaciones sobre la pasión de Cristo, basado en los cuatro evangelios.