La forja de un rebelde, de Arturo Barea, se compone de tres novelas autobiográficas: la forja, La ruta y La llama. El primer volumen cubre su infancia y juventud; el segundo, sus primeras experiencias literarias y, sobre todo, su servicio militar en Marruecos; el tercer volumen, finalmente, es el período justo antes de la guerra civil, y de la misma. Se caracteriza por su estilo directo, su recreación casi fotográfica de los lugares, acontecimientos y sentimientos, su jerga, sus conocimientos locales y, quizás por encima de todo, su honestidad y la falta de la amargura, La forja de un rebelde que ha sido aclamada como una «obra maestra». Muchos consideran que la trilogía como un retrato de primera mano más viva y emocionante en la guerra civil y sus antecedentes.